Thursday, December 22, 2005

Creer, enesima parte.

De las miles de cosas buenas que has traido a mi vida, Adriana, está el Creer. La Fe. Me explico.

Yo era de esos cínicos que decia que Dios está muerto, que no existe, etc., etc. Mi rumbo, decia yo, está escrito ya. Cuando llegaré a la meta, ese es mi trabajo. Dejé de persignarme, dejé de rezar. Dejé de creer. Y hoy, hasta eso es diferente. Pero no creas que regreso corriendo a meterme a oler inciensos y a recibir regaños por cosas que hicieron los faristeos y Adán y Eva y Caín y demás. No. Veo el Creer como una lucecita que de verdad te llena de algo. Esperanza, tolerancia, paciencia, que sé yo. Solo sé que ahora rezo cada noche y cada mañana. Por tí, por mí y por todas esas personas que están cerca o que simplemente han rozado mi vida de una manera especial. Mi oración favorita: Padre Nuestro. Sinceramente me gusta un poco más en inglés. Aqui se las dejo. Recen uno por mí que yo rezaré uno por ustedes cada noche.

Our Father, Who art in heaven,
Hallowed be Thy Name.
Thy Kingdom come.
Thy Will be done, on earth as it is in Heaven. Give us this day our daily bread.
And forgive us our trespasses,
as we forgive those who trespass against us.
And lead us not into temptation,
but deliver us from evil. Amen.

Dios los bendiga. Felices fiestas. Y no usen diciembre como pretexto para querer y demostrar cariño. Usen todo el año como pretexto.