Thursday, November 25, 2004

Y ahora que sigue? Para mí, que sigue?

Y cuando cada paso que das no hace si no llevarte al mismo lugar, una y otra y otra y otra vez, ¿qué?, y cuándo cada beso no significa ya nada, ¿qué? Cuándo hasta lo más dulce te sabe amargo, es hora de dar ese paso que tanto temes, es hora de hacer lo que hace mucho que no te atreves por mil y un razones. Es brincar y no preocuparte de donde vas a caer o de la altura, si no de cómo levantarte. Por eso es bueno brincar con los ojos cerrados y gritando a todo pulmón. Y eso es lo que precisamente ahora quisiera hacer: dejar de sentir esta presión en mi pecho, este hueco por dentro, este nudo en mi cabeza y estas ganas de llorar a moco tendido, saltar y no preocuparme de nada, caer y olvidarme de todo, levantarme en otro lugar, con mi misma piel pero diferentes caras. Quisiera poder dormir hasta tarde, quisiera poder platicar más con mi padre, quisiera hablar más con mi hermana, quisiera saber más de mi madre. Quisiera tener un sábado para ellos, sin nadie en medio, sin ningún mañana. Quisiera poder estar cerca de ti, Kathya, más cerca de ti, Maharba y muy lejos de ti, Citlalic. Quisiera tener 6 años y no saber que es el dinero ni las preocupaciones por no tenerlo, quisiera tener 8 años y que lo más emocionante de mi día fuera poder ver las caricaturas de la tarde, que mi mejor momento fuera ver a aquella niña que tanto me gustaba, que mi mayor alegría fuera cerrar el maldito cuaderno de las tareas. Quisiera ser alguien más y mirarme por fuera para ver que está mal en mí. Quisiera haber dicho más cosas y hecho menos, quisiera haber hablado más poco y escuchado mucho más, quisiera haber dado más besos y hacer más el amor y discutir menos por celos, comer más de mis comidas favoritas, beber más agua de tamarindo y de jamaica, tener todos mis muñecos de la Guerra de las Galaxias intactos, mis revistas de historietas guardadas donde sólo yo sabía. Quisiera ver más tus ojos y menos tu escote, quisiera tener tus labios pegados a los míos y que sientas que no quieres que se acabe ese momento. Quisiera tener 16 años y volver a compartir mis tortas de queso de puerco con Ed, comiendo en los jardines del CBTis, quedarnos dormidos enfrente de la dirección y que nos cachara el prefecto, quisiera ir de campamento de nuevo y volver a hacer el “siempre listos” donde se nos “cayó” Nacho y tú, maldito Ed, me hiciste reír y echaste a perder el drama, donde tú, Transis, despertaste a todos y el jefe de tropa me culpó a mí (y desde entonces me odia), quisiera volver a comer la comida de doña Marina, que siempre tenía un lugar en la mesa por si llegaban los amigotes de sus hijos, quisiera que sus novias, muchachos, me volvieran a llamar “mala influencia”. Quisiera que volviéramos a ser mejores amigos, Paco, que volvieras a confiar en mí (después de todo, ese hueco que existe entre nosotros, fue tu culpa, amigo y tú me sacaste a empellones de tu vida), quisiera que fuéramos a los videojuegos, Chava, que volviéramos a comprar cien pesos de fichas y perdiéramos horas y horas, como idiotas frente a los aparatos aquellos. Quisiera volver a hacer “Estudiantes 1050” y cabulear al micrófono, quisiera tener de nuevo el poder de la cabina de transmisión, poder sentir que te llamen cientos de gentes que te quieren decir algo. Quisiera volver a entrar a la Facultad (pero, te lo juro, ya no me enamoraría de ti, Amazona de la Tinta, y mucho menos de ti, Citlalic) y quisiera volver a tener el mundo entre mis manos y jugar con él a destrozarlo. Quisiera volver a ver la Caída del Muro de Berlín, quisiera volver a esa calle dónde Jacobo anunciaba “es oficial, hace unas horas comenzó la Tormenta del Desierto” y meses después anunciando de nuevo “la victoria es de los aliados, Saddam ha sido derrotado”. Quisiera volver a caminar por los pasillos de mis viejas secundarias, aquella donde fui víctima y aquella donde fui un héroe. Quisiera poder verme de nuevo en el espejo y descubrirme, medio guapo y medio tonto, quisiera volver a tener aquella melena que tanto me gustaba y que tanto les gustaba. Quisiera ver las estrellas sin preocuparme por que tengo que dormir para levantarme temprano mañana, quisiera ver a mi padre y no sentir preocupación por lo que a él le preocupa, quisiera poder jugar más con mis gatas, quisiera ver más tele, quisiera oír más música, quisiera leer; más libros, más comics... más mails de mis amigos. Quisiera estar con ellos, quisiera que mañana nunca llegara y sólo vivir hoy, quisiera ser como siempre he querido ser y no he podido, quisiera volver a verte, Tony, quisiera que me perdonaras, Pilar, quisiera que nunca te hubieras ido, Edith, quisiera no haberte fallado, Bárbara, quisiera haber sido "él" para tí, Citi, quisiera que me miraras diferente, Maharba y que estuvieras conmigo, quisiera que no pelearamos, hermana, quisiera que nunca te hubiera conocido, maldita Amazona de la Tinta, quisiera verte en vivo de nuevo, Sting.

Quisiera soñar con las cosas que me gustan.

Quisiera volver a ser yo.