"You're the fighter you've got the fire
The spirit of a warrior, the champion's heart
You fight for your life because the fighter never quits You make the most of the hand you're dealt
Because the quitter never wins
No!"
Dropkick Murphys, The Warrior's Code
The spirit of a warrior, the champion's heart
You fight for your life because the fighter never quits You make the most of the hand you're dealt
Because the quitter never wins
No!"
Dropkick Murphys, The Warrior's Code
Mientras escribo esto, escucho algo de Heavy Metal y Hard Rock, pa' que más que la verdad. Y mientras lo hago, pienso. En muchas cosas.
Ya he contado aquí cómo me he vuelto el "fearless leader" de la gente con la que laboro. "Es que tú tienes verbo, es que eres bien lanzado". El remate: "es que tú si eres valiente, tienes las bolas de latón". Chale. Y pensaba en esas diferencias, sutiles pero diferencias entre "valiente" y "macho idiota".
Cuándo tienes algún problema, tienes dos opciones: decides cómo y cuándo quieres enfrentarlo, planeando tus opciones, posibles salidas, resoluciones, haciéndolo en TUS términos, en TUS terrenos. O simplemente te divagas de la verdad y dejas pasar el tiempo hasta que el problema no tiene otra solución que enfrentarlo, de cualquier modo y manera.
Cuándo el mencionado problema aparece, decides cómo enfrentarlo y la solución tendrá mucho que ver con tus alcances y limitaciones. O lo harás metiéndote en más líos.
Cuándo alguien depende de tí, puedes tomar las riendas y entregar todo, sin importar nada más. Al fin que cuándo el problema se resuelva, serás libre... ¿no?. O simplemente te lanzas de cabeza, rompiendo más cosas y empeorando la situación, postergando el final del mismo problema.
Si alguien cuenta con que eres más listo, más inteligente, más "verbo", puedes hacer dos cosas: enseñarle a ser más listo, más inteligente o más "verbo". O resolverles la bronca y que después no puedas dar ningún paso sin que te pregunten "¿Cómo lo haces?".
Ahora, las cosas en mi vida pintan mejor que nunca. Muchos, demasiados cambios, todos para bien. Pero no fue si no hasta que planté mis pies firmes y grité para que TODOS me oyeran "¡Basta!". Hasta que todos entendieron que sí, soy líder, que sí cuentan conmigo... pero cuándo mi momento llegara, como se los canté, tendrían que saber pararse por sí mismos y pelear sus propias batallas. Habrá quién suspire y me extrañe, habrá quién se enoje y se aleje de mí. Incluso sé que habrá quiénes dentro de cinco minutos ni siquiera recuerden lo que dije y ni siquiera se acuerden de quién soy. Pero no importa. Ya no quiero volar sin dirección, rescatando gatitos de los árboles y damiselas en peligro. No quiero ponerme en medio de las balas para salvar a alguien más. Ha llegado el momento de ponerme el traje de persona común, de hombre "normal".
A mis compañeros de trabajo se los dije hoy. "Vean cómo podemos hacer porque yo ya no duro mucho aquí". A mis padres se los dije. A mis amigos se los avisé. Y ahora, sólo me queda esperar a que las piezas caigan y sé que contaré con la gente exacta, precisa, la que debe de estar conmigo en medio de lo que se venga para verme salir avante, triunfante, ganador. Para ser testigos como esta vez no me consumo en medio de ninguna hoguera, a pesar de que en mi corazón arde una llama muy fuerte. No soy mejor comandante, no soy mejor líder por llevarlos a la batalla. Seré mejor líder si les enseño a sacar fuerza de sus habilidades, a pulir sus armas y hacerlas efectivas, a conocer sus límites y debilidades. Sé que al final muchas de estas personas simplemente serán más fuertes que yo... en otros sentidos. Y cuándo yo los vea volando, me sentiré orgulloso de saber que los inspiré a querer hacerlo. Ya sea para superarme... o para superarse a ellos mismos.
Ya he contado aquí cómo me he vuelto el "fearless leader" de la gente con la que laboro. "Es que tú tienes verbo, es que eres bien lanzado". El remate: "es que tú si eres valiente, tienes las bolas de latón". Chale. Y pensaba en esas diferencias, sutiles pero diferencias entre "valiente" y "macho idiota".
Cuándo tienes algún problema, tienes dos opciones: decides cómo y cuándo quieres enfrentarlo, planeando tus opciones, posibles salidas, resoluciones, haciéndolo en TUS términos, en TUS terrenos. O simplemente te divagas de la verdad y dejas pasar el tiempo hasta que el problema no tiene otra solución que enfrentarlo, de cualquier modo y manera.
Cuándo el mencionado problema aparece, decides cómo enfrentarlo y la solución tendrá mucho que ver con tus alcances y limitaciones. O lo harás metiéndote en más líos.
Cuándo alguien depende de tí, puedes tomar las riendas y entregar todo, sin importar nada más. Al fin que cuándo el problema se resuelva, serás libre... ¿no?. O simplemente te lanzas de cabeza, rompiendo más cosas y empeorando la situación, postergando el final del mismo problema.
Si alguien cuenta con que eres más listo, más inteligente, más "verbo", puedes hacer dos cosas: enseñarle a ser más listo, más inteligente o más "verbo". O resolverles la bronca y que después no puedas dar ningún paso sin que te pregunten "¿Cómo lo haces?".
Ahora, las cosas en mi vida pintan mejor que nunca. Muchos, demasiados cambios, todos para bien. Pero no fue si no hasta que planté mis pies firmes y grité para que TODOS me oyeran "¡Basta!". Hasta que todos entendieron que sí, soy líder, que sí cuentan conmigo... pero cuándo mi momento llegara, como se los canté, tendrían que saber pararse por sí mismos y pelear sus propias batallas. Habrá quién suspire y me extrañe, habrá quién se enoje y se aleje de mí. Incluso sé que habrá quiénes dentro de cinco minutos ni siquiera recuerden lo que dije y ni siquiera se acuerden de quién soy. Pero no importa. Ya no quiero volar sin dirección, rescatando gatitos de los árboles y damiselas en peligro. No quiero ponerme en medio de las balas para salvar a alguien más. Ha llegado el momento de ponerme el traje de persona común, de hombre "normal".
A mis compañeros de trabajo se los dije hoy. "Vean cómo podemos hacer porque yo ya no duro mucho aquí". A mis padres se los dije. A mis amigos se los avisé. Y ahora, sólo me queda esperar a que las piezas caigan y sé que contaré con la gente exacta, precisa, la que debe de estar conmigo en medio de lo que se venga para verme salir avante, triunfante, ganador. Para ser testigos como esta vez no me consumo en medio de ninguna hoguera, a pesar de que en mi corazón arde una llama muy fuerte. No soy mejor comandante, no soy mejor líder por llevarlos a la batalla. Seré mejor líder si les enseño a sacar fuerza de sus habilidades, a pulir sus armas y hacerlas efectivas, a conocer sus límites y debilidades. Sé que al final muchas de estas personas simplemente serán más fuertes que yo... en otros sentidos. Y cuándo yo los vea volando, me sentiré orgulloso de saber que los inspiré a querer hacerlo. Ya sea para superarme... o para superarse a ellos mismos.
Sí, tengo miedo. Y es que he aprendido que de ahí nace mi valentía. De sentir miedo. Tengo miedo a defraudar a cierta persona. A mí. A mí mismo. Sé que ya no soy el mismo de hace tiempo, que ahora ya no siempre puedo ponerme de pie tan fácil, que las cicatrices nuevas duelen mucho. Sí. Pero también sé que puedo hacerlo porque es algo que NUNCA debí abandonar, que NUNCA debí poner de lado y hacerlo de nuevo es cómo... cómo si NUNCA lo hubiera dejado de hacer. Tengo mucho miedo y eso me hará ser mucho más valiente.
Ya Dije.
Ya Dije.
PD: Princesa, mira esta imagen. ¿A poco no está padre?, ¿ves al Superman con canas y con el símbolo que te gustó?. Tienes razón, renovarse o morir. Y yo, por las dudas, me renuevo.
Who is gonna save youWhen I'm gone?
And who'll watch over you
When I'm gone?
And when I'm gone
Who will break your fall?
Who will you blame?
I can't go on
And let you lose it all
It's more than I can take
Who'll ease your pain?
Ease your pain
alter Bridge, Watch Over You
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