Saturday, June 06, 2009

Hey Jealousy (Jealous Guy)



Primero, neto, esta canción es, SIN DUDA, la mejor referencia a los celos, a lo que nos hacen sentir. Chequen la letra y dsifruten mientras leen. Ya sé que hay quién se reíra de mí por que me conoce, porque sabe mi "historia" con los celos. Y sé que habrá quién se quede con dudas y preguntas. Pero de todos modos, este es un tema que tiene semanas rondando en mi complicadamente sencilla cabezota. Voy con mi hacha.

Lo sé. Tengo un historial demasiado largo como para ser ignorado. Pareciera que buena parte de los últimos cinco, seis, ocho, diez años me la pasé saltando de un "romance" al otro. ¿La peor parte?, que mis años de "gigoló" en realidad estaban más atrás, cuándo ni siquiera las palabras "blog", "internet" o "novia, pareja" fueran una cosa aceptable en mi vida. Y siempre, SIEMPRE supe que ese "pasado" representaría problemas en mi futuro (mi presente, ahora). Y sí. Lo son. Nombres, anécdotas. Historias. Todo eso, lo debo decir cómo es, te provoca. Te provoca desconfianza, temor. No sé porque no te das cuenta, porque no terminas de entenderlo. Mis risas contigo no son cómo ninguna de las veces que me reí antes. No sé cómo lo haces. Me entiendes, aún antes de hablar. No es que me conozcas. Sabes lo que siento. Sabes lo que se siente. Y por eso es que más de una vez has podido entrar a la Fortaleza de la Soledad. Para cuándo me doy cuenta, me haces abrirme, entregarme a tí. Y eso, que antes me aterraba, ahora me agrada. Me hace sentir más humano que nunca. Y me gusta que seas tú quién lo puede lograr. Porque me gustas.

No hay peros entre nosotros. Simplemente que, repito, es mi culpa que estas cosas resurjan, reaparezcan. Los celos. Los he visto descritos como "el Mostro Verde", los he visto descritos como la perdición. Siempre existen, según, en todas las relaciones. Desde áquellas que se supone no son tan complicadas, como las familiares, hasta en las que se supone ni siquiera debiera haberlos, como las amistades. Emocionalmente somos complejos. Hasta los mismos animales los demuestran. Los celos pueden sentirse como carbones en las entrañas, pueden hacerte mejorar tu manera de ser... pero también pueden echarte a perder lo mejor de tu vida entera. Por experiencia te lo cuento: los celos no son buenos compañeros, consejeros ni siquiera amigos. Los celos te hacen ver situaciones que no existen, que no pasan, pasaron ni pasarán. Los celos convierten a tu pareja, a tu amigo, a tu hermana, hermano en tu peor enemigo, en tu rival. Cuándo sientes celos, no ves con claridad, no entiendes, no comprendes. No sabes, no logras distinguir la realidad de tus paranoias. Escuchar algún nombre del pasado de tu pareja, ver que alguien más recibe las atenciones que según sólo tú mereces, creer que otra persona es más apreciada que tú. Esos son los detonantes. Las reacciones van desde las constantes peleas sin razón, los reproches sin motivo, mil cosas más que, en definitiva, no pueden hablar bien de tí.

No justifico los celos. No los entiendo. Tampoco los puedo terminar de describir. Sí, he sido celoso. Mucho. Demasiado. Crucificado a gente que no tenía ninguna culpa y que me demostró su cariño muchas veces. Sí, he sido víctima de los celos. Haciéndome sentir culpable por haber vivido, por simplemente haber tenido un camino que recorrer.

Pero he tomado una determinación. No sé si sea correcto, lo mejor, no sé si tengo razón, si así se "combaten" estas cosas. Sólo sé que NO QUIERO que los celos estén en mi vida nunca más. ¿Ves?, yo no te pregunto nada de tu pasado. No me interesa. No me interesa saber si alguna vez te toparás a tu(s) ex. No me interesa saber si te invitan un café, si te saludan de beso. De verdad. I don´t care. No me interesa. ¿Quieres saber porque?. Porque sé que Te Amo y en realidad eso es de las pocas cosas que debería importarnos. El querernos. El saber que contamos con la persona que amamos. Igual en todas nuestras otras relaciones.

¿Celos de tus hermanos, hermanas?, easy peasy, tú eres Único en tu familia. Aunque creas que alguien quiere más a tu hermano, hermana, mira con calma. Nadie lo quiere cómo a tí. ¿Ves?, Fácil. De veritas, de veritas.

Los celos. Cosa horrible, parte de la naturaleza emocional. Humana y animal. Aprendes a convivir con ellos dentro de tí, usándolos para tu conveniencia o permites que te arruinen como plagas. Así de simple. Y ya se sabe porque opté. Así que, la verdad, los acepto. Y los uso para mi beneficio. Nada más.

Ya Dije.